
Jueves. Masterclass 4: mujer libre.
Jueves. Masterclass 4: mujer libre.

10. Céntrate en ti.
Me casé hace aproximadamente siete años y medio. Resido en Estados Unidos y soy mecánica automotriz de profesión. Opero un taller donde trabajo con automóviles.
Todo lo que aprendí sobre este oficio lo adquirí de mi padre, quien siempre tuvo su propio taller.
La idea que quiero transmitirles es la importancia de centrarse en ustedes mismas, de ponerse en primer plano.
A menudo, les digo a las víctimas que imaginen un círculo y coloquen sus metas dentro de él. Ni siquiera sus hijos caben en ese círculo, ya que si somos madres felices, podremos criar hijos felices.

11. La fundación de Mujer Libre.
Un día, junto con un grupo de valientes mujeres que habíamos sobrevivido, decidimos fundar y abrir al público la Fundación Mujer Libre.
Nuestro enfoque se centra en ayudar a las mujeres a reconocer y liberarse de situaciones de violencia, abuso psicopático, narcisista y machista, independientemente de cómo se les llame.

Hasta el momento, he asumido el papel de directora de la fundación. Esto se debe a mi naturaleza innata de líder y siempre he motivado a las chicas a que, si alguna de ellas quisiera ejercer como directora, estaría dispuesta a ceder el cargo.
No obstante, hasta ahora, ninguna ha tomado la iniciativa, por lo que continúo desempeñando este rol activamente.
En estos años de trabajo, hemos llevado a cabo seminarios en línea y recientemente celebramos un congreso presencial en la ciudad de Tunja, Colombia.
Estamos trabajando en la apertura de puertas para congresos en otros países, esperando con entusiasmo lo que cada año nos depara. Nuestra misión es impulsar el avance y empoderamiento de la mujer.
Mi experiencia personal es un claro ejemplo de cómo una persona puede superar situaciones difíciles.
Cuando dejé atrás mi vida a los 32 años, me sentía completamente perdida. A pesar de mi edad, me sentía como una niña de 5 años en un cuerpo de adulta. No sabía cómo encontrar mi lugar en el mundo.
Sin embargo, con el tiempo y determinación, pude transformar mi vida.
Hoy, casi 18 años después de abandonar al agresor, estoy casada con un hombre empático y funcional, vivo en Estados Unidos, tengo mi propio taller, mi hogar y hablo inglés. Además, lidero la Fundación Mujer Libre.

Tomé la decisión de volar alto, muy alto, tan alto que ni el agresor ni aquellos que me agredieron junto a él podrían ver mi vuelo.
Como las águilas, alcancé alturas inimaginables.
Esto no es un acto de ego, sino un reconocimiento sano de mi propio valor. Estoy orgullosa de mis logros y aunque aún tengo mucho por aprender y recorrer, cada paso que doy me acerca más a mis metas y sueños.