4. Segundo paso: sensibilización en la gestión intelectual.

Durante la sesión, el terapeuta guía a la persona para que identifique sus emociones, relacionándolas con tristeza, enojo o miedo, lo cual será el punto de partida para el segundo paso. 

4.1. Escucha el discurso de la víctima.

En la sensibilización de la violencia, se busca escuchar el discurso de la persona y entender cómo ha normalizado ciertos tratos de otras personas en su vida diaria. Para esto, se utilizan herramientas como el "Violentómetro", el "ciclo de violencia" y el "perfil del maltratador". 

El objetivo es ayudar a la persona a desarrollar una autoestima sana, comprender que el trabajo se enfoca en ella y no en los demás.

5. Tercer paso: piensas

El tercer paso se enfoca mucho más en el manejo intelectual. En este punto, la persona ha alcanzado cierta tranquilidad, bajando la intensidad emocional y sus funciones ejecutivas están más activas. 

Se busca trabajar en pensamientos racionales y claros, evitando pensamientos irracionales o distorsionados que puedan afectar su salud mental. 

La psicoterapia se presenta como un equilibrio entre la realidad y la fantasía, donde se busca evitar tanto un enfoque excesivamente realista como uno demasiado fantasioso.

Un ejemplo que se menciona es el de una persona que piensa que nunca encontrará pareja, lo cual se considera un pensamiento fantasioso y erróneo. Ciertamente, luego de pasar el duelo de la pérdida de la relación tóxica, es posible tener una nueva apertura con otro ser humano, desde unas nuevas condiciones personales.

El terapeuta trabaja con la persona para llevarla a pensamientos más realistas y explorar otras soluciones y perspectivas para resolver su situación.

En conclusión, el manejo intelectual es el tercer paso en este proceso de terapia, donde se busca ayudar a la persona a adoptar un pensamiento más realista y equilibrado, así como a encontrar soluciones y perspectivas más saludables para afrontar sus desafíos emocionales.